Pues tu sabras, el caso es que un compañero me ha dicho que hoy por la mañana ha visto un abarth rojo con kit ss pilotado por una pedazo de rubia entrando al abc serrano.
Retomando el 4c, mientras audi ha cancelado el 4r, este parece que sigue su curso a buena marcha.
Lo que se conoce como Officina 83 integra desde esa fecha las tres divisiones de diseño del grupo italiano, una para Fiat y Abarth, otra para Alfa Romeo, Lancia y Maserati y la tercera trabaja para Fiat Professional, Iveco y New Holland.
Ramaciotti, que trabajó con anterioridad en Ferrari y Pininfarina y ya está inmerso en la versión definitiva del 4C, explicó que este proyecto «nace de la pasión» porque desde hace tiempo Alfa Romeo planeaba hacer un coupé deportivo, ligero y con motor central.
Para encontrar la inspiración, los diseñadores volvieron la vista atrás, al 33 Stradale, el Alfa Romeo más famoso con motor central, que supuso una ruptura a finales de los 60 por su innovador diseño, pero adaptando su lenguaje a los nuevos tiempos.
También toma elementos del Alfa 8C Competizione y el 8C Spider, por ejemplo los grandes faros redondos traseros, que también recuerdan a los nuevos Ferrari.
El 4C es un deportivo puro con toda la genética del Alfa Romeo en su esencia. Tiene dos puertas y dos plazas con el motor en posición trasera central, visible a través de la luneta posterior, y tracción trasera. Mide sólo cuatro metros de largo, 2,4 de distancia entre ejes y 3,95 de ancho.
El peso se ha limitado a 850 kilos, lo que ha sido posible gracias al uso de la fibra de carbono en parte del chasis, las tomas de aire laterales, el interior de las puertas o los retrovisores.
Uno de los elementos de diseño más originales son los tiradores de las puertas, la pieza de carbono del interior emerge en el exterior en forma de escudo ocultando el botón de apertura y dejando un hueco para meter la mano. Cuando la puerta está cerrada enmarcan la toma de aire.
Ramaciotti confirmó que cada pieza del 4C se diseñó en función del peso, consiguiendo un reparto del 60% sobre el eje posterior y el 40% sobre el anterior.
El diseño compacto está reforzado por la línea del paso de rueda delantero que parece prolongarse en el trasero, con los intermitentes de led laterales cubiertos con un cristal que lleva grabado el nombre de la marca. El pequeño maletero posterior tiene capacidad para un trolley o dos cascos.
En el prototipo se ha utilizado una innovadora y exclusiva pintura, denominada «rosso lava», de aspecto aterciopelado y tacto gomoso que cambia de tonalidad en función de la luz.
La celeridad entre el diseño definitivo y la entrada en producción va a ser posible gracias a su concepto de automóvil ligero y de precio asequible, costará entre 40.000 y 45.000 euros, en el que se aprovecharán tecnologías ya existentes.
El motor que lo impulsa es el cuatro cilindros 1.750 turbo de gasolina, con inyección directa, turbocompresor y 200 caballos de potencia que lleva el Giulietta Quadrifoglio Verde y el cambio es el ya conocido Alfa TCT automático, de doble embrague en seco y seis velocidades que ofrece el Mito y se introducirá en breve en el Giulietta.
El resultado es un deportivo que acelera de 0 a 100 km/h en menos de cinco segundos y puede alcanzar una velocidad máxima de más de 250 km/h.
Si el exterior y la mecánica ya están definidos, sin embargo el radical y escultórico interior, marcado por líneas fluidas y acogedoras, será más sencillo y menos sofisticado que el del prototipo. Aunque una buena opción sería mantener la original combinación del rojo y negro en las tapicerías.
El puesto del conductor apuesta por el rojo, mientras en el del acompañante predomina el negro, tanto en el cuero del interior de las puertas como en los tiradores y el mando de apertura, unas bandas de cuero de estilo retro que ayudan a reducir el peso total del vehículo.
En la iluminación interior se ha apostado también por el color rojo marca de la casa.
La consola central tiene un llamativo diseño, una banda ligera como un brazo que separa las dos plazas e integra diferentes indicadores y un botón giratorio para el cambio de marchas. El volante deportivo que integra las levas del cambio combina el acero y el cuero.
En la parte inferior destaca un gran botón para el arranque y la parada del motor. Otro elemento llamativo es la fina banda de acero que sujeta el retrovisor interior y que se prolonga en el techo integrando diferentes mandos que en el prototipo no tienen una función definida y que podrían desaparecer en el modelo de serie.
Frente al conductor, tras el volante, sólo hay dos indicadores. Uno redondo, que es un apantalla de crista líquido que indica con forma de reloj la velocidad de forma analógica y en el centro de forma digital, además de la marcha más adecuada.
A la derecha otra pantalla cuadrada que se podrá configurar a gusto del usuario integra el nivel del depósito, la temperatura del aceite o el trip. El Alfa Romeo 4C es en esencia la genética deportiva de Alfa trasladada al siglo XXI.
El ALFA 4C GTA será el primer Alfa que se venda en USA. Confirmado por Marchionne
La prima Alfa Romeo che toccherà il suolo degli USA sarà la 4C GTA. Lo ha confermato l’a.d Fiat, Sergio Marchionne. La sportiva Alfa Romeo anticiperà la commercializzazione del Suv e della Giulia, entrambe chiacchieratissime. Insomma, questa 4C non è “aria fritta”. Ma qual è il significato di questa auto per il brand italiano? Al Salone di Ginevra la vettura è stata messa sulla pedana rotante dello stand Alfa Romeo alle 4 del mattino del giorno stesso della presentazione. Questo perché i tecnici Alfa, sino all’ultimo, non erano sicuri di essere “nei tempi” per poterla svelare. La risposta alla domanda d’apertura è tutta qui; in questa forte volontà di mostrare l’auto nella cornice più prestigiosa dell’automotive mondiale.
Sono tanti i perché dietro quel badge alfanumerico. Nessuna auto, come questa, è la concreta testimonianza che il marchio sta tornando grande, come tutti gli appassionati di “Automobilismo” invocano da anni. Oltre le operazioni industriali e di marketing: qui si tratta di dire al mondo che Alfa c’è e non sta più zoppicando. Una sportiva secca, due posti e con alcune fra le migliori tecnologie oggi applicabili su una vettura di serie: un segnale di forza migliore per il pubblico e per la concorrenza non poteva esserci.
Indubbiamente la 4C è il mezzo che stavamo aspettando da anni per poter dire che il “cuore sportivo” della casa italiana non ha smesso di battere. Potremmo stare per ore a parlare del design che, per ovvi motivi, non potrà mai piacere a tutti. Ma sotto il vestito, la sostanza non si discute: è da sportiva di razza che, con ghigno superbo, sembra poter “fare spallucce” dinanzi a qualsiasi concorrente diretta. Probabilmente oltre le più rosee aspettative dell’alfista più incallito. Ma data la valenza della sfida, questa 4C dovrà rasentare la perfezione che le è richiesta: stiamo pur sempre parlando di un ennesimo simbolo dell’eccellenza italiana che avrà il compito di stregare migliaia di persone nel mondo. A partire dal mercato più difficile, quello americano.